Por que esperar el final para reaccionar, aún el sol sale y alumbra y da su rostro con resplandor. La gran nube gris se acerca posándose sobre la tierra alrededor, la división se hará visible entre el bello paraíso y la oscuridad que no perdonará la humanidad.
Desapariciones se verán y confusión habrá. Y ahí estarás sin saber que hacer tras la visión mostrada desde la antigüedad, sondearán en tu cabeza las líneas plasmadas por revelación que cayeron un día del cielo.
Estarás y tendrás que decidir qué hacer.
¿Iras en busca de aquellos que son succionados por la oscuridad o simplemente decidirás caminar hacia el camino de la vida eterna sin huella alguna? ¿Estará tu alma tranquila si el deseo de ir en medio de la oscuridad y rescatar las almas en penumbra se derrumba ante tus ojos por la parálisis de ideas humanas? Mira a tu alrededor, rompe el cristal que guarda tus anhelos y bendecido será cada paso que des hacia el lumbral, no detengas la obra con tus manos, no pares las pisadas de la libertad, alza tus manos al cielo y deja actuar el que contigo está. El Espíritu de Dios será quién hará. Abre tus pupilas y cierra tus ojos.
